Este estudio evaluó el contenido de grasa y fibra de la dieta durante la restricción energética (60% de la EMR calculada para un peso corporal ideal) para el control de la obesidad en 12 perros castrados durante 7 semanas. 6 perros recibieron una dieta rica en grasa, baja en fibra (35,4 kcal% de la grasa, 2,9% de la materia seca). 6 perros recibieron una dieta baja en grasa, rica en fibra (24,5kcal% de la grasa, 27% de la materia seca). La dieta baja en grasa y rica en fibra causó unas disminuciones significativamente mayores de la grasa corporal y colesterol sérico, así como una reducción no estadísticamente significativa del peso corporal y la presión arterial media.