Aunque los requisitos de proteína medidos por el balance de nitrógeno no cambian con la edad, los ancianos tienen el mayor riesgo de déficit (mucho más que los niños). Hay gran interés por saber si la cantidad y calidad de sus ingestiones de proteína pueden influir en su calidad de vida en términos de movilidad y bienestar general. Esta presentación intenta dar sentido a una literatura que a menudo es diversa y complicada.
Proteína para una salud óptima en el envejecimiento de los seres humanos: Controversias actuales
Millward, D.J.